Cuatro años desde que empezó el cambio.

4 años ya y parece que fué ayer cuando empezó todo. Muchas cosas han pasado y no todas buenas, pero lo que importa, es que me mantengo en mi peso y sigo siendo una persona nueva.
Llevo mucho tiempo pensando en escribir este post, pero sobre todo en publicar las fotos que lo ilustrarán, pero es que sinceramente, ya no me reconozco en esas fotos. No se quien era esa chica, porque la que soy ahora desde luego no. Y porque mucha gente, no me conoció entonces y van a flipar con lo que van a ver. Y me da un poco de vergüenza, aunque en el fondo siento orgullo y sobre todo satisfacción por todo lo que he conseguido. Así que hoy que cumplo los 42, me armo de valor y doy el paso. Hoy es el día.

Tampoco me preguntéis como llegué a estar así porque ni yo tengo respuesta. Imagino que te vas dejando te vas dejando hasta que es demasiado tarde. Y aunque yo siempre supe que estaba gorda (tengo ojos y espejos en casa), creía que el esfuerzo tendría que ser tan descomunal, que prefería quedarme como estaba antes que realizar ese fuerzo el cual no me veía capaz de afrontar.

Pero el día llegó. Y me puse manos a la obra. Sin prisa pero sin pausa, y todo ese esfuerzo que hice, (y fue muuuuuchooooo) tuvo una recompensa brutal. Es lo mejor que he hecho nunca. Porque mi vida cambió, para siempre. Y lo mejor, es que sigo en esta nueva vida que tanto me gusta y tanto me satisface. Una nueva vida de deporte, salud, buenas costumbres y buenos alimentos. Y sobre todo, de una autoestima normal, como debe de ser. Tan normal, como yo.

Ahí van las primeras fotos de como estaba. Es un montaje que hice en 2015 con distintas imágenes de mi estado físico en distintos años.

IMG_0968

¿Habéis flipado eh? La verdad es que el verano del cambio, fué «Un verano duro de cojones» pero la imagen que lo resume todo es esta que vas más abajo. Vale que en la de la izquierda, no estoy demasiado favorecida (playa, coleta, de negro…) y en la de la derecha, estaba de boda y estoy monísima (no tengo abuela) pero soy yo en las dos imágenes, da igual arreglada que no, ahí está el cambio. La foto de la izquierda es 4 meses antes de empezar el cambio, el cual duró exactamente 11 meses. De febrero de 2014 a enero de 2015.

dietista_miguel_sainz

Seguramente, si me conocías entonces, ya no te acuerdes de como estaba, a mi también me pasa. Ahora me cuesta reconocerme en estas fotos, pero a medida que adelgazaba, también me costó aceptarme en una talla M y S. La cabeza tiene que asumir la nueva situación y aceptar el nuevo cuerpo. Yo estaba delgada pero mi cabeza seguía buscando ropa de la XXL, y claro, me la probaba y me quedaba gigante. A Zara me costó mucho tiempo entrar. Seguía pensando que en esa tienda, no había nada para mi. Y gracias a mi amigo David, que me cogió una tarde y me llevó, pude entrar y comprobar que entraba en una talla L (esto sería agosto de 2014 y habría quitado unos 35 kg.) Fue tan importante para mi poder comprarme algo en Zara, que me hice hasta una foto. Y esa blusa que me compré, la tengo guardada, no me la puedo poner porque no me vale, me está grande, pero la guardaré siempre. Fue una de mis barreras mentales.

primera compra en zara

El aprendizaje sigue porque tanto mi cuerpo como sobre todo mi mente, tiene que aprender muchas cosas que no sabe. Como que si te pasas un día con la comida no pasa nada, como que si no haces un día deporte tampoco pasa nada, como que en el veranos hay que saber desconectar para poder conectar de nuevo en invierno… bueno, muchas cosas que mi cabeza «alemana» tiene que desaprender.
Desaprender a ser tan estricta y darme algún capricho que otro.

Bueno gente, espero no haberos aburrido demasiado ni haberos dejado muy en shock. Estoy muy orgullosa de lo que he conseguido porque además, me he demostrado a mi misma que no tengo límites. En esta vida podré conseguir todo lo que me proponga. Ahora, mucha gente entenderá mis rarezas al comer y mi manía de salir a las 6:00 de la mañana a correr, pero si algo he aprendido con este cambio, es que los 60 kilos que me quité, lo conseguí hacer gracias a la disciplina y la rutina y muchas veces, a mi cabezonería y mis  «guevos». Soy Corral!! #VamosCorral #2018promete #de2en2

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